ATRAPADOS POR LO QUE NOS PASA

ATRAPADOS POR LO QUE NOS PASA.

La terrible sobrerreacción humana moderna a los acontecimientos de vida.

“Estoy convencido que la vida es 10% lo que te pasa y 90% como reaccionaste ante ello” Charles R. Swindoll. Pastor norteamericano.

“Un trauma en la vida no causa el problema: solo actúa como detonador. Una serie de circunstancias genéticas, familiares, sociales, culturales (y yo resaltaría nutricionales) crea en el individuo un terreno en cuyas profundidades pueden yacer bien cargas explosivas o bien semillas” Alejandro Jodorowsky/Cabaret

Místico.

Caso real: Es medianoche, María, recostada junto a sus amados hijos, siente toda la tristeza, rabia e impotencia del mundo, su corazón va a estallar; cierra los ojos esperando despertar de esta pesadilla: José, su primogénito de 3 años y Guadalupe, su niña-bebe de apenas 10 meses de vida, agonizan en sus brazos después de haber sido picados por un alacrán. Viven en una ranchería, alejados de atención médica, y todos los remedios a su alcance no surtieron efecto. Al amanecer, contempla con el corazón destrozado, roto, los cuerpos sin vida de sus retoños. Mira al cielo, implorando a Dios consuelo y entendimiento, aceptando con dolor su voluntad. Los llora, los entierra, platicándoles que algún día se volverán a reunir en algún lugar para poder realizar juntos la vida que esta vez no se logró. Hoy María vive rodeada de sus siguientes 7 hijos, más de 20 nietos y un par de bisnietos. ¿Por qué antes podíamos como seres humanos superar el duelo y seguir adelante en la vida? ¿Por qué hoy, una mujer “moderna” hubiera caído en shock, hubiera sido hospitalizada, hubiera desfilado ante el Psicólogo, Tanatólogo, Psiquiatra, Prozac, Tafil? Además, se hubiera victimizado en la vida, divorciado por irritabilidad e intolerancia, seria infértil por bloqueo mental inconsciente y años después, hubiera escrito libros y formado una asociación de madres sin hijos; Finalmente moriría sola y de cáncer, este último por una clara asociación estadística-neurobiológica con su depresión.

Entendiendo el presente.

¿Qué pasa hoy en el cerebro humano que no podemos superar lo que nos pasa en la vida? ¿Por qué vivimos con rencor, rabia, sentimiento, coraje, duelo y recuerdo? ¿Por qué las actividades de la vida diaria las hacemos sobre-reaccionando, explosivos, irritables, englobándolo y erróneamente justificándolo con “es el estrés”? Primero: tenemos que aceptar que somos una evolución que ha enfrentado en 300,000 años de existencia sobre la tierra mortandad-hambrunas-pandemias-guerras-desolacion-cataclismos-eras glaciales-etcétera y esto nos dotó de mecanismos neurobiológicos para entender y superar el duelo. ¿Están descompuestos estos mecanismos en el presente? y Segundo: Para entender lo que nos pasa, tenemos que re-leer los pensamientos-axiomas que están cambiando la forma de ver la vida, soberbios golpes que la ciencia le está dando a la orgullosa humanidad:

1º: Nuestro planeta no es el centro del universo, el sol no gira alrededor de la tierra sino al revés.

2º. Somos una especie evolucionada, venimos de una transformación, tenemos un antecedente común con los monos, changos y simios y alguna vez fuimos animales inferiores.

3º. No somos totalmente dueños de nuestra conducta: La irritabilidad, la impulsividad, la visceralidad, el enamoramiento, la superación del duelo, son reacciones primitivas neuro-bioquímicas que afectan el resultado final de nuestro accionar.

4º.Los alimentos, desde simples vitaminas, minerales y principalmente las grasas, afectan esas reacciones bioquímicas cerebrales, modificando nuestros pensamientos: negativos-positivos, pesimismo-optimismo, impulso-control, razón vs emoción.

Hay un gran avance en la neurobiología que busca respuestas, diferenciándola de la neurobiología que busca patentes($) y dinero y que pinta un panorama complejo, oscuro y misterioso del funcionamiento cerebral humano; desafortunadamente algunos($) psiquiatras($) se inclinan más($) por esta última. Los nuevos abordajes neurobiológicos están poniendo atención a un sistema fisiológico que se creía menos importante en el cerebro: LOS EICOSANOIDES. Estos últimos se forman de las grasas que ingiere el individuo, de forma muy relevante en el embarazo, lactancia e infancia y explican los cambios evolutivos, alimenticios y conductuales que hemos tenido.

Cerebro de grasa.

El cerebro está hecho de grasas, y de estas grasas, la mayoría debe de ser Docosahexaenoato-omega 3 con un poco de Eicosapentaenoato-omega 3, (DHA/EPA-Ω3) que provienen de la lactancia materna de calidad y cantidad (es decir, de una mama que coma productos del mar y minimice los lácteos vacunos en la lactancia y esta se prolongue por 2-3 años) y el pescado, mariscos y suplementos DHA-omega 3 que le den de comer al niño o niña; También importante pero en menor/poca cantidad, debe de recibir Acido Araquidonico-omega 6 (ARA-Ω6) que proviene de las grasas de animales terrestres. Para la formación y funcionamiento del Homo sapiens, homínido moderno, se necesitan ambos; desafortunadamente la balanza esta inclinada desde hace 100 años a favor del ARA-Ω6 que se ingiere más de 10 veces que el DHA/EPA-Ω3, y este cambio en alimentos está regresándonos a la barbarie-conducta animal y al pensamiento mágico-figurativo predominando la emoción sobre la razón (Léase el articulo previo “Historia Neanderthal y momento actual de la conducta humana” en mi blog: http://evolucionyconducta.blogspot.com).

Reacción bioquímica.

Cuando el ser humano enfrenta un duelo, una situación adversa, un problema personal, familiar o laboral, bioquímicamente en el cerebro se desprenden estas grasas de la pared de las neuronas y se desdoblan en EICOSANOIDES, debiéndose observar un equilibrio entre la cascada del ARA-Ω6 que nos prepara para la guerra-adversidad-emoción-sentimiento y la cascada del DHA/EPA-Ω3 que nos da equilibrio-contención-razonamiento-entendimiento. Al desbalancearse esta reacción bioquímica por el desorden alimenticio moderno, debido a la pobre cantidad y mala calidad de leche materna, el uso de la aun ineficiente y experimental formula infantil, exceso de cárnicos y uso de leche y sus sólidos en la dieta, el ser humano queda atrapado en una reacción cerebral exagerada en emoción, ansiedad extrema, pesimismo, rabia, coraje, obnubilación, cerrazón, ceguera mental y duelo prologando. Esto se debe a que el fenómeno ARA-Ω6 > DHA/EPA-Ω3 genera una severa inflamación cerebral con problemas en la producción y recepción de neurotransmisores (dopamina, serotonina, norepinefrina, endorfinas) que termina afectando al individuo en todos niveles: le produce pensamientos negativos, conducta autodestructiva, trastornos autonómicos como mareos, desmayos, presión alta o baja, palpitaciones; trastornos gastrointestinales como gastritis, reflujo, colitis; trastornos osteomusculares como ciática, dolor de nuca, artritis, y un sinnúmero de alteraciones físicas y mentales viscerales.

¿Y entonces que debemos hacer?

Para con nuestros hijos:

Respetar y aceptar el diseño evolutivo extraordinario que nos diferenció del resto de las especies sobre la tierra: Nuestro cerebro de Homo sapiens esta hecho de leche materna y grasa de pescado, y ¡punto!... Es triste y desgastante observar que este hecho tiene más de 10 años demostrado científicamente y todavía hay obstetras, neonatologos y pediatras que en forma burlesca, displicente y negligente continúan sin tomar en serio la suplementación omega-3 y DHA en estas vitales etapas de vida. Continúan sin poner atención a los problemas neuropsiquiátricos que el desbalance nutricional ARA-Ω6 > DHA/EPA-Ω3 deja en forma irreversible en el cerebro de los pequeños. Los padres deben poner atención a esto y por su cuenta, mantener la lactancia materna, incrementar las cantidades de pescados de agua fría (sardina, atún en aceite preferente lomo, salmón) que dan a sus hijos en los alimentos siendo indispensable darles frutas y verduras! (VERDURAS O CANCER, es una realidad) que a través de vitaminas como los folatos y minerales como el magnesio, optimizan la función cerebral. Debemos de limitar la ingesta de carnes rojas a no más de 500gr a la semana, y dejar solo para festividades sociales (cumpleaños, premios, reuniones sociales) la peligrosa leche y sus derivados sólidos, (queso, yogurth, crema, etcétera) error alimenticio evolutivo de la era post-neolítica y relacionado con trastornos alérgicos y neuro-psiquiátricos.

Para con nosotros como adultos:

Entender con humildad y autocritica que nuestra mente-conducta y sus reacciones neurobiológicas primitivas nos ha traicionado muchas veces en nuestra vida; hemos lastimado a nuestros seres queridos con gritos, explosiones, insultos, majaderías, conducta visceral irreflexiva e impulsiva, y lo queremos remediar después “pidiendo perdón”. La mujer ha sufrido mucho con la convivencia evolutiva con el macho de la especie, y ha llevado la peor parte; golpes, violaciones, misoginia, humillaciones, esclavismo, explotación sexual; pero no es victimizándose y escogiendo el camino de la enfermedad (elección bastante frecuente: artritis, cáncer, migrañas, gastritis, colitis, enfermedades autoinmunes) ni es tampoco a través de su pensamiento mágico-figurativo de la idea de un dios antropomórfico paternalista como va a mejorar este periodo de vida que le tocó. Hombres y mujeres hemos mal tomado decisiones trascendentales en nuestra vida por la sobre-reacción mental que tenemos y no dominamos: violencia, divorcios, abandonos, malas inversiones, malas compras, renuncias, bipolaridad, suicidio, accidentes, adicciones a drogas, alcohol, etcétera.

Aceptemos este daño mental estructural sobre-reactor emocional, y atendámonos nutricional y de ser necesario farmacológicamente (medicamentos neuroptimizadores y estabilizadores cerebrales) para poder volver a vivir en armonía como especie, y le brindemos a nuestros hijos un mejor futuro o al menos, un poco mas de garantía de supervivencia de la especie.